VIÑA DEL MAR.- El fútbol siempre da revancha. A veces, con un poco de retraso, pero la da. Y con Carlos Tevez no hizo la excepción: cuatro años después de aquel penal fallado que costó la eliminación de Argentina ante Uruguay en la última Copa América, el “Apache” volvió para redimirse. Las manos de Sergio Romero habían hecho milagros otra vez, dejando la clasificación a un gol de distancia, pero Lucas Biglia y Marcos Rojo los habían desperdiciado. Ya para entonces, todo el país llevaba un par de penales preguntándose: “¿y por qué no patea Tevez?”.
La última atajada de “Chiquito” vio salir al “jugador del pueblo” derecho hacia el punto de ejecución. Había llegado su hora. Y con un remate fuerte al medio, idéntico al que en 2011 le atajó Fernando Muslera, dejó despatarrado al casi invencible David Ospina y se sacó cuatro años de frustración de la garganta.
“Esto es fútbol, y te da revancha. Lo que pasó, pasó. Esto es de mis compañeros, no sólo mío. Ellos hicieron un partido fantástico y estoy orgulloso de pertenecer a este equipo”, rescató Tevez, quien entró en el segundo tiempo. Hasta ahora, no ha jugado ningún partido como titular. “Es muy dificil entrar en un equipo que juega de esta manera. Los chicos lo están haciendo muy bien. Desde afuera también se disfruta. Y cuando te toca entrar, tenés que tratar de hacer lo mejor por el equipo”, señaló el flamante refuerzo de Boca, que entró para hacer justicia en un partido en el que todo había sido de Argentina.
“Cuando la pelota entró, lo único en que pensé fue en mi familia. Son ellos los que siempre me bancan”, destacó emocionado Tevez, después de saldar una vieja cuenta pendiente.